Cuenta con diseño ergonómico, velocidad de impresión y temperatura ajustables y sistema de seguridad para evitar quemaduras. Incluye un bolígrafo de impresión 3D con un filamento incorporado y otros dos metros de filamentos de tres colores. Aunque esté un poco descolorida o desgastada, la tela de las camisetas es fina y manejable para la elaboración de cojines. En los años 1990 los diseños de camisetas se volvieron extravagantes en muchos casos, principalmente porque se buscaba que las mismas tuvieran un buen aspecto como objeto de venta para los aficionados.